Un mundo de luz y color es el de los hilos, hay miles de colores, muchos tipos y marcas, los más habituales y los que os van a vender sin preguntar en la tienda son los de 100% poliéster, pero los hay también 100% algodón también los hay mezcla con algo más de un 60% de algodón y casi 40% de poliéster, la verdad es que en el tema de los hilos pasa un poco como con las tijeras, la calidad sí es muy importante, sobre todo porque ponerle tanto empeño y esfuerzo a confeccionar una prenda para que luego un hilo de mala calidad lo eche todo a perder pues… ¡como que no! y aunque el hilo de poliéster, muy natural no es, sí que es resistente, y siempre podéis recurrir a la mezcla si os gusta más. Los precios oscilan entre los 2 euros y los 4 euros, si la bobina tiene 1.000 metros puede superar los 6 euros, y si tenéis algún rastro cerca quizá podáis tener la suerte de encontrar algunos buenos hilos por 1 euro la bobina, os desaconsejo totalmente el tema de las tiendas de todo a 1 euro que te venden un mega pack de colorines estridentes, esos como mucho para coser botones para eso sí sirven 🙂
Los hilos están compuestos por dos hebras, tres… y de ello resultan hilos más o menos gruesos según la cantidad de hebras rizadas que lleven y sirven para diferentes cosas, por ejemplo el hilo más grueso (solo caben 30 metros en cada bobina) es el verde que veis en la foto de abajo, es para coser ojales y pespuntes, luego también tenéis el hilo «coselotodo» (de 100, 200 y 500 metros) que es el más útil y versátil como su propio nombre indica, hilo para bordar, hilo extrafuerte para por ejemplo la cremallera de un vestido de novia (no hace falta que os diga por qué…) hilo invisible, hilo flexible… lo que os decía, ¡un mundo!